Sentencia fuera de contexto. El caso del SUP-RAP- 749/2017

El poner en marcha la casilla única para el Proceso Electoral 2017-2018 representa un reto para el Instituto Nacional Electoral, pues su implementación tiene repercusiones en dos procedimientos de la jornada electoral: el cómputo y escrutinio, así como la transmisión oportuna de los resultados. Algunos datos relevantes que demuestran la complejidad operativa son: 

 
1.Se instalarán casillas únicas en 30 estados. Esto significa que los funcionarios de casilla recibirán la votación de entre 4 y 7 elecciones.

2.En cada casilla se pueden emitir hasta 750 votos por tipo de elección. Por lo tanto, si se registra la misma participación que en 2012 (63.08%), en 2018 los funcionarios deberán contabilizar un promedio de 473 votos emitidos por cargo; reto que se complejiza a mayor número de elecciones:

3.Se tendrá la opción de votar por candidatos independientes; hecho que implica adicionar un paso en la clasificación, conteo y el registro de los sufragios. Se estima que a nivel presidencial participen 3 candidatos independientes, 44 candidatos para senadores y 39 para diputados, más los candidatos independientes que a nivel local obtengan el registro.

4.El registro de diversas coaliciones (totales, parciales y flexibles) para las distintas elecciones representa un reto para los funcionarios de casilla durante el escrutinio, el cómputo y el llenado del acta, debido a que impone una regla diferenciada para cada elección. A nivel federal habrá 3 coaliciones totales para las elecciones presidenciales, 3 coaliciones parciales para las senadurías y 2 coaliciones parciales y una coalición flexible para las diputaciones. Además, a nivel local se reproducen una amplia gama de combinaciones de condiciones similares.

5.Para la elección presidencial se conformaron 3 coaliciones integradas por tres partidos políticos. Esto implica que los ciudadanos pueden emitir su voto a favor de una coalición a través de 9 maneras válidas. Solo para la elección presidencial los funcionarios de casilla tendrán que escrutar y contar 27 posibles combinaciones de sufragio.

6.Los funcionarios de casilla tendrán que asentar en el acta de escrutinio y cómputo el desglose de todas las combinaciones de votos emitidas a favor de cada una de las coaliciones, es decir, 27 rubros con los resultados de la votación a favor de los candidatos postulados por las coaliciones electorales, con su respectivo desglose por combinación de votación por partidos políticos.

7.A nivel local tenemos que en dos estados se registró una coalición; en 11 estados dos coaliciones; en 14 estados 3 coaliciones; en una entidad 5 coaliciones; y en un estado 6 coaliciones. El variopinto escenario de las coaliciones locales impone una compleja tarea de clasificación, conteo, sumatoria y registro de los votos para los funcionarios de casilla debido a las múltiples combinaciones de votación.

Las problemáticas del escrutinio y cómputo el día de la jornada electoral conllevan a que dicho procedimiento se desarrolle en un mayor tiempo, provocando, a su vez, que la generación y transmisión de los resultados de la casilla demore en exceso. Esto conllevaría a formar un efecto de vacío de información –un retraso de proporciones épicas– para que la ciudadanía, los candidatos y los partidos políticos conozcan las tendencias de los resultados de las elecciones, en un contexto donde la falta de claridad conduce a la desconfianza en el proceso mismo.

Atendiendo a lo anterior, el INE reformó el Reglamento de Elecciones para poder cumplir con la obligación legal de dar resultados certeros, y oportunos el día de la elección. Empero, de seguir de manera textual la ruta marcada para el escrutinio y cómputo, la información que emita la autoridad electoral no será oportuna y no cumplirá con su función de brindar certeza.